Con una reputación que se forjó en la costa mediterránea italiana y se expandió a nivel internacional, actualmente, Ornellaia no solo es una finca emblemática de la familia Frescobaldi sino también uno de los nombres del vino más importantes de Italia. Fundada en 1981, Tenuta dell’Ornellaia nació de la idea visionaria del marqués Lodovico Antinori de plantar vides de Burdeos en la región de Bolgheri.
En 1999, el productor de vino californiano, mundialmente famoso, Robert Mondavi se unió a la aventura toscana. En 2002, compartió la gestión de la finca con el grupo Frescobaldi, que desde entonces ha estado a cargo de Ornellaia. Desde entonces, este grupo emblemático de viñedos toscanos durante más de siete siglos dedica su saber hacer histórico al servicio de la finca, para devolverle a Ornellaia sus características de nobleza. Y el grupo Frescobaldi llevó a cabo importantes renovaciones para infundir a la casa un espíritu increíblemente innovador haciendo que la búsqueda de la excelencia sea el motor de los lugares a la vanguardia en modernidad.
En pocas décadas, gracias al talento único del enólogo Axel Heinz y el enólogo consultor Michel Rolland, la casa forja la reputación de sus grandes vinos en todo el mundo, reinterpretando la delicadeza de los vinos italianos de un gran terruño.
Como un tesoro escondido, el viñedo de Ornellaia se esconde en la Toscana al pie de las colinas cerca de Bolgheri, a pocos kilómetros de la costa mediterránea de Italia. Allí, los viñedos y los olivares respiran el rocío del mar en verano y se protegen de los fríos vientos del norte en invierno. En las siete parcelas de Bellaria Alta, Bellaria, Fontina, Sondraie, Bolgherese, Ornellaia Fornace y Ferruggini, los suelos varían entre arena, limo y piedra caliza para formar un mosaico de terruños único en el mundo. Y con tierras de influencias marinas, aluviales y volcánicas, Ornellaia encarna la riqueza de un terruño donde cada color de cepa puede encontrar su lugar.
La prestigiosa finca italiana elabora sus vinos con la idea de que deben reflejar con autenticidad la grandeza de su terruño. Así, desde la vid hasta las bodegas, se presta una especial atención a las uvas. Con este deseo de excelencia, la Tenuta dell’Ornellaia trata sus viñas con un cuidado y una precisión incomparables. El resultado son vinos imbuidos de la más fina expresión de elegancia.
